Tras rodar Macbeth (1971), y de paso exorcizar sus pesadillas más terribles provocadas por el brutal asesinato de su mujer y de sus tres amigos, Roman Polanski se lanzó a otro tipo de obsesiones. En su siguiente proyecto contaría la historia de una joven muy atractiva “atrapada en una solitaria villa frente al mar y rodeada de obsesos sexuales”. El tema no le podía gustar más. La Alicia de Lewis Carroll sexualizada hasta la vulgaridad en una película que el legendario, y amigo del director, Robert Evans definió como “la peor que he visto en mi vida”.
¿Qué? (Che?) (1972), como se tituló finalmente el film, necesitaba una belleza espectacular para el papel de Nancy, la chica que va desnuda mientras Marcello Mastroianni la persigue en calzoncillos. La elegida resultó ser una joven norteamericana de 21 años llamada Sydne Rome que había dejado su Ohio natal para buscarse la vida como actriz en Italia. La crítica dijo de la debutante que “le bastaba con aparecer desnuda para cumplir su propósito en la película”, pero daba igual porque tras el estreno Sydne se convirtió en una celebridad internacional. Nadie la tomó nunca en serio como actriz, pero como Ursula Andress o Marisa Berenson, fue una de las “reinas” del glamour europeo, invitada de lujo en cualquier fiesta y objetivo de los fotógrafos ya sea en Roma, París o Londres.
Sydne, por supuesto, siguió en el cine haciendo películas del estilo de Un cachete en el culete (La sculacciata) (1974) o Gigolo (1978), con David Bowie, Marlene Dietrich y Kim Novak, incluso vino a España en 1986 para rodar con José María Forqué un biopic de Julián Gayarre con José Carreras. Tuvo un romance con Julio Iglesias, en 2013 compró los derechos para adaptar la novela y posterior película ¿Qué fue de Baby Jane? (1962), montando la primera presentación escénica de la historia, que se estrenó en Roma, Italia, y fue todo un éxito, triunfó como Jane Fonda con sus videos de aereobic y actualmente está casada con el prestigioso doctor Roberto Bernabei (nombrado en 2021 médico personal del Papa Francisco). Pero en 2009 la vida de Sydne Rome cambió para siempre. La actriz sufrió un grave accidente de coche, el airbag le explotó en la cara y los músculos faciales se le paralizaron.
En The Palace (estreno en cines el 26 de abril) interpreta a una caricatura de sí misma, una mujer a la que la cirugía estética ha destrozado la cara y que se pasea por el hotel acompañada de sus amigas, igual de desfiguradas que ella.
A su favor, hay que decir que la bella Sydne tiene sentido del humor y ha vuelto con Polanski 50 años después para reírse hasta de su sombra.
