Colombo era una serie muy buena, por algo con ella terminaron su carrera genios como Richard Quine (1920-1989) y la empezaron otros como Steven Spielberg (1946) o Jonathan Demme (1944-2017). También en ella se refugiaron astros del cine clásico al final de sus trayectorias (Jane Greer, Anne Baxter, Ray Milland, Myrna Loy) o empezaron futuras ganadoras del Oscar. Janet Leigh (1927-2004) tenía 48 años cuando protagonizó el episodio Forgotten Lady (1975), el primero de la 5ª temporada, y ya estaba casi retirada del cine. Jamie Lee Curtis (1958) tenía apenas 19 cuando interpretó a una camarera en The Bye-Bye Sky High I.Q. Murder Case (1977), el tercero de la sexta temporada. Estaba empezando y un año después debutaría en el cine con Halloween (1978).
Cuando Janet apareció en la serie, habían pasado 15 años de su nominación al Oscar por Psicosis y nueve de su última película destacada en los cines, como ex-esposa del detective privado en Harper (1966). Es ahí donde Paul Newman como Lew Harper pregunta si no le va a desear suerte, a lo que ella le contesta: «Solo que enfermes de soledad eterna». Pero da lo mismo, Janet Leigh con 39 años estaba acabada para el cine.
Es muy posible que cuando recogió el Oscar Jamie Lee Curtis se acordara de la injusticia que Hollywood cometió con su madre. Por eso la nombró y lloró al recordarla. También se acordó de su padre Tony Curtis (1925-2010), pero en 1980, mientras Janet mendigaba un pequeño papel en La Niebla (The Fog) con su hija y John Carpenter de nuevo juntos como gran reclamo, Tony interpretaba en el cine con 55 años a Casanova y seducía a Marisa Berenson, Britt Ekland, Sylva Koscina y Marisa Mell, es decir, algunas de las actrices más bellas de la época.
Tampoco es que Jamie Lee necesite acordarse de nadie, ella misma es un ejemplo de esto que estamos hablando.
Antes de Colombo su madre se negó a que se presentase al casting para interpretar a Regan en El Exorcista (1973), aunque de nada sirvió porque con 19 aparecía en un episodio de Los ángeles de Charlie, donde interpretaba a una campeona de golf amiga de Kris Munroe (Cheryl Ladd), y a continuación ya estaba frente a Michael Myers. Fue reina del cine de terror (por eso agradeció con el Oscar a todos los seguidores del género), luego pegó el pelotazo con las comedias Trading Places (Entre pillos anda el juego) (1983) y Un pez llamado Wanda (1988), acaparó todas las portadas como profesora de aerobic en Perfect (1985), interpretó a una policía novata a las órdenes de Kathryn Bigelow en Acero Azul (Blue Steel) (1990) y rozó la gloria con Mentiras arriesgadas (True Lies) (1994), del ex marido de la anterior, James Cameron. Por su papel de esposa del agente secreto Arnold Schwarzenegger recibió una nominación al Globo de Oro como actriz en Comedia/Musical, aunque luego se convirtió en una de las pocas que ha ganado ese premio en esa categoría, pero luego no ha sido candidata al Oscar. Fue como una señal, porque tenía 36 años y, aunque parezca increíble, su carrera estaba a punto de estancarse. En esa época la conexión de Jamie con el cine de terror era tan fuerte que incluso el escritor Ira Levin se hizo eco de ello en su novela Sliver, publicada en 1991. Es la misma novela donde se nombra Psicosis, de tal modo que madre e hija están en el mismo lugar, según Levin. En Sliver, Vida, la vecina de la protagonista, comenta que el edificio donde viven ha sido bautizado como «El Rescacielos del Horror» y sigue: ¡Uau! Me siento como si estuviera en una película de Jamie Lee Curtis”.
Gracias a la saga Halloween, Jamie Lee siguió en nuestras vidas, pero las cosas se pusieron realmente mal. A su madre le había pasado lo mismo, pero con tres años más. Jamie Lee, como Michael Myers, ha tenido muchas resurrecciones, pero la decisiva fue con Rian Johnson en Knives Out (Puñales por la espalda) (2019), comedia de misterio que le llevó directamente a Todo a la vez en todas partes (2022).
Jamie Lee ha ganado el Oscar con 64 años. Grace Wheeler, la actriz en declive y olvidada que interpreta Janet Leigh en el episodio Forgotten Lady (1975) comenta desesperada: “sé que nadie llamará a mi puerta ofreciéndome un papel ahora”. Grace fue una gran estrella en el Hollywood del sistema de estudios, brillaba como la que más formando pareja con Neil Diamond (John Payne), una especie de Fred Astaire y Ginger Rogers que arrasaban. Pero ahora es una estrella acabada, y no ha cumplido los 50. Gloria Swanson tenía más o menos esa edad cuando protagonizó Sunset Boulevard (El crepúsculo de los dioses) (1950) y para que no lo olvidemos Janet Leigh se convierte en este episodio en un poco Norma Desmond. Hay un mayordomo maravilloso que interpreta con toda la gracia del mundo Maurice Evans y, cómo no, en la mansión hay sesiones de cine por la noche donde se proyectan películas antiguas de la estrella. Si Norma veía La Reina Kelly (1932), película real protagonizada por Gloria Swanson, Grace pasa el rato viendo la comedia musical Walking My Baby Back Home (1953), con Janet Leigh y Donald O’Connor. Pero Grace está olvidada o a punto de estarlo, aunque sueña con resucitar su carrera con Song and Dance, proyecto ficticio basado en That’s Entertaiment! (Érase una vez en Hollywood) (1974), una película resumen de los musicales de la Era Dorada de Hollywood.
Así que tenemos a actrices canceladas por su edad, expulsadas del sistema antes de llegar a los 50, las reales Janet y Jamie Lee, y las ficticias Grace Wheeler y Norma Desmond. Pero Jamie Lee Curtis ha resurgido de forma espectacular, como John Travolta o Brendan Fraser, ella con su Oscar y abrazada a su amiga Sigourney Weaver. Lo cierto es que si hubiera estado Melanie Griffith se hubiera agarrado a ella, porque es su amiga del alma, ambas hijas de actrices de Hitchcock, niñas del show business que han crecido entre focos y cámaras. Pero a Melanie no le ha ido tan bien como a su amiga. Tiene 65 años y con 43 ya estaba cancelada. La última vez que se contó con ella en serio fue para interpretar a Marion Davies en RKO 281 (1999), una espléndida película, pero para televisión.