Si Thomas Harris publicase El silencio de los corderos ahora y se llevase al cine en estos momentos, una buena candidata para el papel de Clarice Starling sería la inglesa Annabelle Wallis (Oxford, Oxfordshire, 1984) que, además, físicamente es como describe Harris al personaje (también encajaba con esa descripción Michelle Pfeiffer, la primera candidata de Jonathan Demme).
En The Silencing (2020), por ejemplo, Wallis interpreta a la sheriff Gustafson, nueva en el puesto y sin experiencia y, como Clarice, con un asesino en serie al acecho. El tipo secuestra a chicas a las que suelta en el bosque para cazarlas como si fueran animales. Estamos en Canadá, en una reserva natural en la zona de Echo Falls, Alberta, un lugar rodeado de montañas, lagos y ríos.
Todo esto nos recuerda a Robert Hansen, llamado “El cazador de Alaska”, el serial killer que entre 1973 y 1983 se dedicó a secuestrar prostitutas para llevarlas en su avioneta a las montañas y allí perseguirlas como presas de caza. Se cree que fueron entre 17 y 21 víctimas. The Silencing no está basada en el caso Hansen, aunque los parecidos son más que razonables. Sí lo estaba The Frozen Ground (Caza al asesino) (2013), con John Cusack como Hansen.
Gustafson no sólo se las tiene que ver con este asesino en serie cuyo lema es “sólo me llevo a chicas que nadie echará de menos”, además debe lidiar con un hermano problemático, interpretado por Hero Fiennes Tiffin, ídolo por la saga cinematográfica After y sobrino de los hermanos Fiennes, Ralph y Joseph, y con un ermitaño cabreado con el mundo que vive en una aislada cabaña en el bosque, atormentado por la desaparición de su hija adolescente cinco años atrás. Este personaje lo interpreta con una intensidad que duele el danés Nikolaj Coster-Waldau, el Jaime Lannister de Juego de tronos.
The Silencing se puede ver en Movistar Plus +
