Será el 23 de agosto cuando Ti West desembarque en los cines con la tercera entrega de su trilogía salvaje, original, loca y sangrienta. Lo mejorcito del cine reciente de terror, sustos y locura.
La protagonista de las tres películas es la actriz inglesa Mia Goth, una chica muy particular, y no sólo porque ha estado casada con Shia LaBeouf. Precisamente fue el actor quien dijo en cierta ocasión que le gustaban “las chicas oscuras, misteriosas, tal vez incluso góticas. Y con mucha personalidad”. Y esa es la imagen que transmite Mia, toda una cosmopolita, de madre brasileña y padre canadiense de Nueva Escocia. Sus abuelos maternos son el artista estadounidense Lee Jaffe y la actriz brasileña Maria Gladys, tiene ciudadanía de tres países: Reino Unido, Brasil y Canadá y, con 6 películas de terror, ya hay quien la llama “la más moderna reina del grito”.
Mia incluso ha sobrevivido a Lars von Trier, con el que rodó su primera película destacada, Nymphomaniac (Volumen 2) (2013). Luego llegó un pequeño papel en la ambiciosa Everest (2015), la incomprendida e inquietante La cura del bienestar (2016), la española El secreto de Marrowbone (2017) y el remake de Luca Guadagnino Suspiria (2018). Emma (2020) nos ofreció una Mia más tranquila, pero una llamada del especialista en cine de terror Ti West, lo volvió a cambiar todo. La quería para un ambicioso proyecto que ha terminado siendo una trilogía.
La primera película
X (2022) fue la primera entrega. Un gótico americano de manual, ambientado en 1979, cinco años después del estreno de La matanza de Texas (1975), la película que lo cambió todo como ya lo había transformado antes Psicosis (1960). Ambas están muy presentes en X. Con la de Tobe Hooper comparte ese look campestre y ese grupo de jóvenes medio hippies en furgoneta por los campos de Texas. Con la de Hitchcock, además de una referencia explícita porque se la cita en un diálogo, también comparte una escena de ducha, una laguna donde van a parar los coches de las víctimas y una anciana siniestra en la ventana de la casa perdida.
En 1979 el cine francés causaba furor entre los modernos y todos los jóvenes cineastas querían parecerse a François Truffaut o Jean-Luc Godard, entre ellos uno de los protagonistas de esta película, el cámara al que llaman RJ (Owen Campbell). Él va en el grupo que viaja en furgoneta a una apartada zona rural de Texas para rodar en una granja una película porno. RJ piensa que se “pueden hacer películas guarras buenas” y lo va a intentar (nada nuevo, aspira a lo mismo que Stanley Kubrick, que también barajó la posibilidad de rodar una película pornográfica que se iba a titular «Blue Movie»).
Estamos en los tiempos de Garganta profunda (Deep Throat), que se estrenó en 1972 y recaudó 600 millones de dólares (dinero que se utilizó para fundar Bryanston Distributing, la productora detrás de La matanza de Texas). Como dice Ti West, “los 70 es una época en la que la línea entre estos dos géneros estaba tan difuminada que compartían artistas, audiencias y teatros mugrientos”.
La película que va a rodar RJ y su equipo se titula “Las hijas del granjero” (The Farmer’s Daughters) y desde luego no tiene nada que ver con la película por la que Loretta Young ganó el Oscar. El equipo de cineastas lo forman, además de RJ, el productor ejecutivo de la película y un poco el que manda (interpretado por Martin Henderson), el actor porno veterano de Vietnam (Kid Cudi), la actriz (Brittany Snow) que interpreta a una de “las hijas del granjero”, la novia y ayudante de RJ (Jenna Ortega, Miércoles en la reciente serie sobre la Familia Addams) y Maxime, la novia del productor y también actriz en la película. Este personaje es la protagonista, grita desesperada que no es que quiera, es que necesita ser famosa, y lo interpreta Mia Goth. Maxime tiene que aguantar que la siniestra anciana que vive en la granja que han alquilado para rodar “Las hijas del granjero” le diga a la cara: “Tú y yo somos iguales”. Esta frase es la clave de todo, entre otras cosas, porque Mia Goth interpreta a los dos personajes, Maxime y Pearl, que es como se llama la tremenda señora.
Antes incluso del estreno de X y antes incluso de iniciarse su rodaje, Ti West y Mia Goth hablaron muchas horas a través de FaceTime, y en plena pandemia. ¿Qué hacían Pearl y su marido en esa apartada granja y por qué vivían en esas condiciones tan terribles? ¿Cuál era la historia de Pearl, su pasado, su vida?
La segunda película
Todas esas preguntas encontraron respuesta en un guion que Ti y Mia escribieron juntos. Ambos estaban en un hotel de Nueva Zelanda a punto de comenzar el rodaje de X y el director le preguntó a su actriz si estaba dispuesta a quedarse más tiempo para rodar después Pearl, la precuela ambientada en 1918, décadas antes de los eventos de X, que narraba la juventud de la hija del granjero y por qué se terminó convirtiendo en una despiadada y sádica asesina.
X se estrenó en marzo de 2022 y Pearl en septiembre de ese mismo año, pero hay que verlas al revés si uno quiere seguir cronológicamente los acontecimientos ocurridos en la granja de los horrores.
Si uno ve primero X, se coloca ante una granja tétrica, oscura y vieja, estilo la casa de Psicosis, un lugar donde nadie pararía ni dos segundos, no mejor que la cabaña de Km. 666 (Wrong Turn) (2003). Sin embargo, ese mismo escenario lo vemos en Pearl y uno parece estar en el mundo de Babe (1995), una granja idílica llena de colores vivos y encantadores animales. Los del departamento de arte tuvieron trabajo: primero la ensuciaron hasta hacerla repulsiva y, cuando comenzó el rodaje de la precuela, la limpiaron hasta conseguir que te quieras quedar a vivir en ella para siempre.
Pearl sueña con ser bailarina y una estrella de cine tan fascinante como Theda Bara, la considerada uno de los primeros símbolos sexuales del cine, a la que idolatra hasta el punto de que al cocodrilo de la laguna cercana a su casa le ha puesto de nombre Theda. En el cine del pueblo proyectan Cleopatra (1917) y el encargado del local es un joven apuesto que aprovecha para enseñar a la chica películas pornográficas (este personaje lo interpreta David Corenswet, y quédense con su nombre porque es el nuevo Superman en el cine). El proyeccionista bohemio, le llama Pearl, y en X ella y su marido todavía se acuerdan de él.
Pearl tiene una madre posesiva y cruel, como la de Norman Bates, hay un sótano donde ocurren cosas horribles (como en toda película del gótico americano, aunque ahora me acuerdo de la maravillosa Arsénico por compasión, que es una comedia), estamos en plena pandemia y la gente lleva mascarillas (la mal llamada Gripe Española, que mató entre 1918 y 1920 a más de 40 millones de personas en todo el mundo) y Pearl grita cuando la dejan que lo único que desea es que la quieran. Pero la joven mata animales, una mala señal si hemos leído sobre asesinos en serie.
Cuenta Ti West que para que Mia Goth se metiera en situación le sugirió que viera ¿Qué fue de Baby Jane? (What Ever Happened to Baby Jane?) (1962) y El mago de Oz (The Wizard of Oz) (1939).
Pearl tiene muchos fans y el número aumenta. Hay quien dice que es como un «Joker para chicas», porque ellas se identifican con Pearl de manera similar a cómo algunos chicos lo hacen con el protagonista de la película protagonizada por Joaquin Phoenix.
Ti West y Mia Goth todavía no han dicho la última palabra. La tercera parte es esta MaXXXine y en ella veremos a la protagonista de X de viaje a Los Ángeles en la década de 1980 para cumplir su sueño de ser actriz. El director ha contratado para acompañar a su estrella a Michelle Monaghan, Elizabeth Debicki, Lily Collins, Kevin Bacon y Giancarlo Esposito. La cosa promete.
MaXXXine se estrena el 23 de agosto.