Ya no queda nada para los Oscar y los Screen Actors Guild Awards son los últimos premios que se celebran en Hollywood antes de los de la Academia, que son el punto final al maratón de fiestas y galardones que dominan todos los años los meses de enero y febrero.
SAG Awards, también conocidos como Premios del Sindicato de Actores, han destacado con el gran premio a Cónclave. Este galardón reconoce el trabajo de todo el reparto de una película. En este caso, de Ralph Fiennes, Sergio Castellitto, John Lithgow, Isabella Rossellini, Lucian Msamati y Stanley Tucci. Las otras candidatas eran los repartos de Wicked, Un complero desconocido, Anora y Emilia Perez.
El SAG Awards al mejor actor se lo llevó Timothée Chalamet (Un completo desconocido), superando a los otros nominados Ralph Fiennes (Cónclave), Colman Domingo (Las vidas de Sing Sing), Adrien Brody (The Brutalist) y Daniel Craig (Queer). El joven actor se ha convertido de pronto y en el último momento en favorito para ganar el Oscar, cuando hasta hace nada la cosa estaba entre Adrien Brody y Ralph Fiennes.
La mejor actriz fue Demi Moore (La sustancia), que superó en votos a Cynthia Erivo (Wicked), Mikey Madison (Anora), Karla Sofía Gascón (Emilia Perez) y Pamela Anderson (The Last Showgirl).
Los elegidos en interpretaciones de reparto fueron los previstos, Kieran Culkin (A Real Pain) y Zoe Saldaña (Emilia Perez). Estaban nominados Jonathan Bailey (Wicked), Yura Borisov (Anora), Edward Norton (Un completo desconocido) y Jeremy Strong (The Apprentice) y nominadas Monica Barbaro (Un completo desconocido), Jamie Lee Curtis (The Last Showgirl), Danielle Deadwyler (La lección de piano) y Ariana Grande (Wicked).
En televisión, ganó todo el reparto de Solo asesinatos en el edificio en comedia y el de Shogun en drama, Martin Short (Solo asesinatos en el edificio) mejor actor en comedia y Jean Smart mejor actriz en comedia por Hacks. Hiroyuki Sanada y Anna Sawai ganaron por Shogun interpretaciones en drama y Jessica Gunning (Mi reno de peluche) y Colin Farrel (El pingüino) fueron destacados por sus trabajos en una serie limitada (una sola temporada con final cerrado).
La gran homenajeada fue Jane Fonda. La actriz de 87 años se llevó los plausos del público con un discurso muy reivindicativo, como no podía ser menos tratándose de una estrella que nunca se ha callado y ha tenido siempre muchos problemas por sus posicionamientos políticos. «Es un honor recibir este premio, pero aún hay mucho trabajo por hacer. No podemos quedarnos callados ante las injusticias» empezó diciendo para luego resaltar: «Y que no haya dudas: la empatía no es debilidad ni es estar woke. Por cierto, estar woke solo significa que te importa la gente»
Muchos de los candidatos, como Zoe Saldaña, Colman Domingo, Jeremy Strong y más llegaron a la 31.ª edición anual de los premios SAG, celebrados el pasado 23 de febrero en Los Ángeles, California, en Audi Q6 e-trons, el vehículo oficial de la gala.
