Después del terremoto que provocó la compra de Fox por parte de Disney, o cómo Hollywood asistía atónito a que un gigante del cine se comiera a otro, tenemos ahora otra operación de gran calado, pero no tan dramática.
¿Quién ha comprado el gigante Paramount Global, que incluye CBS, Nickelodeon y Paramount Pictures? Pues la compañía Skydance, cuyo CEO y fundador David Ellison se convierte ahora en el gran jefe de esta nueva Paramount. Jeff Shell, hasta hace poco director ejecutivo de NBCUniversal, ha sido elegido como presidente. Por cierto, David Ellison es hermano de Megan Ellison, ambos hijos del multimillonario empresario Larry Ellison. Megan es la productora que ha estado detrás de maravillosas películas como Zero Dark Thirty (2012), La gran estafa americana (2013), Foxcatcher (2014), Detroit (2017), El hilo invisible (2017), El escándalo (Bombshell) (2019) o La casa Gucci (2021). Si David tiene el mismo gusto que su hermana, a Paramount Pictures le irá muy bien.
Disney compró la mítica 21st Century Fox en 2019 por 71.300 millones de dólares. Skydance se ha hecho con Paramount por 8.000 millones.
La familia Redstone, con Shari, la hija de Sumner Redstone a la cabeza, la anterior propietaria del gigante Paramount, ha dejado en manos de David Ellison un estudio que ya en 1917 era líder del negocio del cine porque «tenía las estrellas y tenía los cines». Es decir, el producto y los locales para distribuir ese material. Era exhibido y distribuidor.
Ellison ahora y Adolph Zukor al principio, como el hombre que fundó en 1912 Famous Players Film Company y en 1916 se asoció con Jesse L. Lasky para crear Famous Players-Lasky Corporation, la compañía que en 1927 adoptó el nombre definitivo de Paramount. Zukor, el hombre que dirigió con mano de hierro el estudio y murió en 1976 con 103 años.
Se suele decir que a Paramount «le gustan los héroes que han merodeado por el mundo». En su nómina, Ernst Lubitsch, Cecil B. DeMille, Mitchel Leisen, Carole Lombard, Gary Cooper, Claudette Colbert, Cary Grant, Bing Crosby, Harold Lloyd o Mae West. La reina era Gloria Swanson, tan arriba dentro del estudio que ahora es de David Ellison que rechazó un millón de dólares al año y firmó con United Artists.
Paramount llevó del teatro al cine a los Hermanos Marx, creó la pareja Alan Ladd / Veronica Lake y dio absoluta libertad a sus cineastas, como Billy Wilder, Preston Sturges o Josef Von Sternberg, y por eso se le conocía como «el estudio de los directores». Su lema: «Una buena película es mejor cuando la hace una estrella. Una buena película con una estrella es mejor cuando la hace un director con talento. Por lo tanto, las estrellas son inseparables de una dirección con talento». En definitiva, Paramount defendía que el cine tiene que ser popular, pero puede ser artístico. ¿Cumplirá esa premisa Gladiator 2, el estreno más potente y esperado de la compañía en 2024?
Muchos años después del periodo Adolph Zukor, Paramount vivió un momento de gloria, tanta que hasta se han escrito libros para contarnos esa etapa fascinante. Fue durante la década de 1960, cuando Robert Evans entró como director general de producción. Evans trabajaba para Charles Bluhdorn, el gran jefe de Gulf & Western, la propietaria de Paramount en ese momento. De Bluhdorn se decía que no se sabía si tenía «alma de romántico y mente de delincuente» o «alma de delincuente y mente de romántico».
En cualquier caso, contrató a Evans, un antiguo actor, playboy y sin experiencia en el negocio, y bajo su dirección Paramount puso en marcha cuatro películas que cada una a su manera cambiaron la historia del cine y de la industria: La semilla del diablo (1968), Love Story (1970), El Padrino (1972) y Chinatown (1974).
«Las películas sobreviven, como la Paramount, al menos su nombre. Pero ahora hay un serio «problema en el paraíso» (Trouble in Paradise, la película de 1932 que aquí conocemos como Un ladrón en la alcoba y fue uno de los grandes éxitos del estudio), ahora Hollywood es una ciudad oscura». Estas palabras de Ethan Mordden que leímos hace tiempo en el libro The Hollywood Studios, muy bien pueden servir para esta nueva etapa de Paramount con David Ellis. Esperemos que alumbre aunque sea un poco esa oscuridad.