Ahora que Paul Schrader estrena nueva película (El maestro jardinero, el 9 de Junio) y que podemos ver a Ethan Hawke a las órdenes de Pedro Almodóvar en Extraña forma de vida, es un buen momento para rescatar una película que hicieron juntos el genial director y guionista Schrader y el particular actor Hawke.
Resulta difícil de creer, pero hasta First Reformed (El Reverendo) (2017), Paul Schrader nunca había estado nominado al Oscar, ni como director ni como guionista. Por el guion original de esta película recibió su primera candidatura, y estamos hablando del hombre que ha escrito Yakuza (1974), Taxi Driver (1976), Toro Salvaje (1980), Mishima (1985), La última tentación de Cristo (1988) o Aflicción (1997) y dirigido American Gigolo (1980), El placer de los extraños (1990) o Desenfocado (Auto Focus) (2002).
En First Reformed, Ethan Hawke interpreta al reverendo Ernst Toller, un personaje para el que se barajaron también los nombres de Jake Gyllenhaal y Oscar Isaac (Schrader terminaría trabajando con él en The Card Counter). El director dice que se decidió por el que fuera atormentado joven de El club de los poetas muertos (1989) por “ese permanente aire de hastío que proyecta”.
Su experiencia en el cine español
Alejandro Amenábar también se fijaría en eso para darle el papel del detective Bruce Kenner en Regresión (2015). Como le dice alguien a Toller, “para ti cada hora es la hora más oscura”. Hawke muy bien podría haber aspirado al Oscar, pero finalmente no entró en el grupo de nominados. Hubiera sido su primera candidatura como actor protagonista tras estar como secundario por Training Day (2001) y Boyhood (2014) y como guionista por Antes del atardecer (2004) y Antes del anochecer (2013).
Schrader no necesita mirar a nadie para inspirarse, él y su turbulento mundo interior son suficientes para que broten las ideas, pero para la fotografía de First Reformed sí que se inspiró en Ida (2013) de Pawel Pawlikowski, se documentó sobre el problema del cambio climático para construir parte de la trama, repasó la filmografía de Ingmar Bergman (sobre todo Los comulgantes), Robert Bresson y Andrei Tarkovsky y revisó la película Diario de un cura de campaña (1951), de Robert Bresson.
El reverendo tiene 46 años, su hijo murió en Irak, guerra a la que fue animado por él, lo que le atormenta y le destroza por dentro. Amanda Seyfried está aquí a años luz del universo Mamma Mia! y se mete en la piel de una joven embarazada de 20 semanas cuyo marido ha encontrado en el activismo medioambiental su razón de vivir. Hace años, Schrader soltaba en una entrevista la siguiente frase: “Cuando un japonés está harto, cierra la ventana y se suicida; cuando un americano está en las mismas circunstancias, abre la ventana y empieza a disparar contra los demás”. De eso también trata esta película.
Un dilema de fondo
La cuestión es: ¿vamos a traer a un bebé a este mundo tan horrible? ¿Qué clase de planeta destrozado vamos a dejar a las siguientes generaciones? A ese y otros dilemas nos enfrentamos con esta intensa y complicada película que hay que verla como si tuviéramos todo el tiempo del mundo.
