Orlando Bloom fue un marine en Black Hawk Down (2001), esa magnífica película por la que Ridley Scott fue nominado al Oscar y en la que se juntó la mayor cantera de nuevos actores que uno recuerda (Josh Hartnett, Ewan McGregor, Eric Bana, Ewen Bremmer, Hugh Dancy, Jason Isaacs, Nicolaj Coster-Waldau, Tom Hardy, Tom Sizemore, William Fichtner, Ron Eldard, Ioan Gruffudd…).
En The Outpost (2019) Orlando ha subido de graduación, pero sigue enredado en misiones de alto riesgo en países lejanos, asuntos que salen muy mal. Ahora es capitán y pasa de la tristemente célebre Batalla de Mogadiscio, Somalia 4 de octubre de 1993, a la trágica Batalla de Kamdesh, Afganistán 3 de octubre de 2009, con 300 combatientes talibán asaltando un puesto del ejército americano en un valle cerca del pueblo de Kamdesh. Doce horas de infierno que costó la vida a ocho soldados y 22 resultaron heridos. En Mogadiscio murieron 19 marines y hubo 73 heridos, más uno capturado.
The Outpost, basada en el libro que recoge lo ocurrido The Outpost: An Untold Story of American Valor, del periodista, escritor y presentador estrella Jake Tapper, se parece mucho a la película de Ridley Scott. Las dos están basadas en hechos reales y en las dos tenemos a soldados americanos atrapados en auténticas ratoneras, unos por las calles de Mogadiscio, los otros en el Puesto Avanzado de Combate Keating. En ambas los enemigos son fuerzas aparentemente menos preparadas que fueron subestimadas, tanto los guerrilleros somalíes como los talibán que bajaron de las montañas. Y en las dos “combaten” actores que en el primer caso han dado mucho juego y en el otro lo darán.
En The Outpost hay mucho “hijo de…”. Tenemos a Scott Eastwood, hijo de Clint, a James Jagger, hijo de Mick y Jerry Hall, y a Milo Gibson, hijo de Mel. Luego está el imparable Caleb Landry Jones, premio de interpretación en Cannes por Nitram (2021). Will Attenborough es nieto del recordado Richard, y Scott Alda Coffey desde luego se parece mucho a su abuelo, el gran Alan Alda.
A mitad de la película, un soldado grita desesperado ante el avance talibán: “necesitamos los Black Hawk ya”. Alguien le tenía que haber apuntado que lo que necesitan de verdad es a Ridley Scott. Aunque como director Rod Lurie no era una aparente mala elección, no hay nadie como el grandísimo cineasta de Alien (1979), que va a cumplir 86 años y ha llegado a decir que “nada le estresa en este mundo”.
Lurie tiene 59, es de Israel y ha dirigido a Joan Alllen, Gary Oldman, Jeff Bridges y Christian Slater en The Contender (Candidata al poder) (2000) y a Robert Redford, James Gandolfini y Mark Ruffalo en The Last Castle (La Última Fortaleza) (2001), aunque en la parte negativa hay que poner ese remake de Straw Dogs (Perros de paja) que seguramente hizo revolverse en la tumba a Sam Peckinpah. Ridley Scott jamás hubiera aceptado ese proyecto.
Al terminar el ataque al campamento Keating, los americanos se marcharon casi mirar atrás y “rápidamente el almacén del puesto avanzado fue saqueado por los insurgentes y bombardeado por los aviones estadounidenses en un esfuerzo por destruir las municiones que habían dejado atrás”.
The Outpost se puede ver en Prime Video