Más allá del triángulo amoroso que vemos en Ferrari, formado por Enzo Ferrari (Adam Driver), su mujer Laura (Penélope Cruz) y su amante Lina Lardi (Shailene Woodley), en la película de Michael Mann también tienen un papel destacado los pilotos de carreras que protagonizan las espectaculares escenas.
El principal piloto del equipo de Enzo Ferrari fue el español Alfonso de Portago (1928-1957), que sufrió un horrible accidente en la recta final de la Mille Miglia, en el que perdieron la vida él, y nueve espectadores. Y que fue parte de la razón por la que en 1957 se puso fin a la carrera para siempre. La escena que recrea la colisión es la más impactante de la película.
El papel de Portago lo interpreta el actor brasileño Gabriel Leone, del que Mann dice lo siguiente: “Gabriel tenía algo que recuerda a Marlon Brando, y pensé que esa cualidad caracterizaba también a de Portago, quien incluso llegó a vestirse igual que Brando en la película Salvaje, de 1953”.
Gabriel Leone ha cogido velocidad y rueda ahora una serie donde da vida a Ayrton Senna (1960-1994), el piloto de automovilismo brasileño que también falleció durante una carrera celebrada precisamente en el circuito Enzo e Dino Ferrari.
El veterano de la escudería Ferrari era Piero Taruffi, y para este personaje Mann escogió a Patrick Dempsey, el famoso actor norteamericano que aportaba, además, 20 años de experiencia real como piloto de carreras automovilísticas, ya que ha competido, entre otras, en la Baja 1000 de México, en las 1000 Milllas de Sebring, en las 500 Millas de Saytona, y el las icónicas 24 Horas de Le Mans. También ha subido al podio como piloto, e incluso es propietario de un equipo.
No nos extraña que el protagonista de la serie Anatomía de Grey confiese que “he estado pendiente de este proyecto cinematográfico durante unos 15 años. En esa época, en las carreras y en la cultura italiana, era como en la ópera: los altibajos la emoción, la muerte, la sexualidad… ¡fue increíble!”.
Dempsey leyó el libro The Techmique of Motor Racin (La Técnica del Automovilismo), escrito por Taruffi en 1959, que resultó ser un recurso fundamental, tanto para comprender la técnica del piloto, como su amistad con Enzo Ferrari, y la confianza que se tenían mutuamente.
“Taruffi no era tan conocido como otros pilotos. Tenía 50 años cuando ganó la “Mille Miglia”, y se retiró después de esa carrera. Puede que no fuera el competidor más rápido, pero era el más consistente, y el más sabio, en el sentido de que sabía lo que tenía que hacer para cuidar el equipo, y ganar la carrera».
El inglés Jack O’Connell (Money Monster) fue seleccionado para el papel del conductor británico Peter Collins; y al igual que a Leone, le entusiasmó la idea de unirse a unas especie de “campamento de pilotos”, que pusieron en marcha Mann y el coordinador de los especialista, Robert Nagle, para aclimatar a los actores a las condiciones de ser un piloto de carreras.
“El objetivo de esa especie de campamento, era sobre todo que los actores comprendiéramos la mentalidad de un piloto de carreras, de hecho, la cantidad de conducción que tuvimos que hacer delante de la cámara era muy pequeña en comparación con la que hicimos sin que nos filmaran. Pero se trataba de ver lo motorizado que te sientes, y de lo mecánico que termina siendo tu cerebro. Y eso fue muy útil, porque evidentemente, cuando estás detrás del volante, no te concentras en nada más”.
El piloto Marino Franchitti, campeón de Fórmula Uno, da vida en la película al desafortunado conductor Eugenio Castellotti, que murió mientras intentaba recuperar el récord de velocidad de Ferrari de Maserati. En pantalla esto sucede al principio de la película.
