Ya empiezan a sonar los primeros nombres para los Oscar. Es lo que se ha llamado siempre “la antesala” de los premios más importantes del cine, es decir, las diferentes asociaciones de prensa de Estados Unidos, que se disponen a elegir a sus favoritos. Los primeros en hacerlo han sido los críticos de Nueva York (New York Film Critics Circle Awards), que han premiado a Los asesinos de la luna como mejor película y a Christopher Nolan como mejor director por Oppenheimer. Sin duda, una decisión salomónica.
La mejor ópera prima ha sido para los críticos de Nueva York la coreana (del Sur, claro) Past Lives (Vidas pasadas) y la mejor película extranjera ha sido la francesa Anatomía de una caída, Palma de Oro en el último Cannes. Curiosamente, la representante de Francia para luchar por el Oscar a la mejor película internacional no será esta cinta, la elegida ha sido A fuego lento, el romance entre cocinas de Tran Anh Hung (sin desmerecer de esta película, en una extraña e incomprensible decisión que recuerda a lo que hizo España con Hable con ella).
Completan el grupo de películas galardonadas en Nueva York: El chico y la garza (mejor cinta de animación) y Secretos de un escándalo (mejor guion).
En cuanto a los premios de interpretación, los elegidos fueron el alemán Franz Rogowski por la francesa Passages, la actriz Lily Gladstone por Los asesinos de la luna y los secundarios Charles Melton, por su composición del joven marido de Julianne Moore en Secretos de un escándalo y Da’Vine Joy Randolph (en la foto), por su interpretación de la jefa de cocinas del internado donde transcurre la acción de Los que se quedan.
