Ya lo dice Julia Roberts, “puedes matarte en el gimnasio, pero un 97% eres como la genética manda que seas. Y sé de qué hablo”. La genética manda y eso también lo cree Jamie Dornan.
El actor de 41 años, que en Misterio en Venecia interpreta al Doctor Leslie Ferrier, uno de los sospechosos encerrados en el siniestro palazzo, ha dicho que “tiene suerte con sus genes” y por eso “probablemente soy la peor persona para entrevistar en Men’s Health”.
Pero Jamie, que saltó al estrellato cuando fue elegido para ser el seductor Christian Grey en la trilogía Cincuenta sombras y un poco antes el asesino en serie Paul Spector en la excelente serie La Caza, va más lejos y asegura que realmente su problema es que siempre ha necesitado ganar peso. Jaime fue modelo antes que actor y en esa época dice que estuvo metiéndome Big Macs sin parar. Además, asegura que odiaba ser guapo y que incluso ahora no le gusta su físico. “Yo era un chico flaco de adolescente y todavía me siento como ese niño flaco”.
