La actriz inglesa de 78 años se enfrenta a uno de los retos más importantes de su carrera: dar vida a la cuarta primera ministra de Israel (17 de marzo de 1969-3 de junio de 1974), que además fue la primera mujer de su país y tercera en el mundo en asumir un alto cargo.
En Golda, estreno previsto en España en diciembre, Mirren interpreta a esta mujer que ha pasado a la historia como la «Dama de Hierro de Israel», poniendo el foco en un periodo concreto de su mandato: durante las responsabilidades y decisiones de alto riesgo a las que se enfrentó cuando estalló la Guerra del Yom Kippur. La película recrea la experiencia de Meir durante los 19 días de aquella guerra (del 6 al 25 de octubre de 1973), que marcaría de forma indeleble tanto su legado como la conciencia israelí.
En una entrevista realizada el pasado julio, cuando la película se presentó en el marco del Festival de Cine de Jerusalén, la actriz fue tajante: «Creo en Israel, en la existencia de Israel, y creo que Israel tiene que avanzar hacia el futuro, por el resto de la eternidad. Creo en Israel debido al Holocausto».
También confesó que cuando le llegó el proyecto hubo personas que trataron de convencerla para que no aceptara, pero ella quiso resaltar que «he conocido a personas extraordinarias en Israel».
La actriz fue muy sincera y admitió que antes de hacer la película «no sabía mucho sobre Golda, pero sí recuerdo claramente el sentimiento de triunfo, satisfacción y asombro que supuso el hecho de que una mujer hubiera sido elegida para liderar un país. Fue un momento muy emocionante para las mujeres en general”.
También apuntó que la película invita a “conversaciones muy, muy profundas sobre lo que significa ser judío”.
En Golda, Liev Schreiber interpreta a Henry Kissinger y la francesa Camille Cottin a Lou Kasddar, asistente personal de Golda Meir durante muchos años.
Dirige el joven cineasta Guy Nattiv, ganador del Oscar al Mejor cortometraje de ficción por Skin (2918) y director de un largometraje sobre el mismo tema, también titulado Skin (2018), protagonizado por Jamie Bell.
