Crónica desde Hollywood. A vueltas con Blancanieves, pero nadie se atreve con Clint Eastwood

Tres actrices y tres Blancanieves diferentes, pero la polémica es casi siempre la misma. En Hollywood se atreven con la heroína de Disney, pero no con Clint Eastwood, que literalmente hace lo que le da la gana.

Gal Gadot y Rachel Zegler con el director de Blancanieves, Marc Webb

Tres malvadas brujas

Gal Gadot necesitó cuatro horas de maquillaje diarios para transformarse en la bruja de Blancanieves (2025). La actriz declaró que “había nacido” para interpretar este papel. Por eso no hizo ningún casting. El personaje fue suyo desde el principio, sin necesidad de pruebas.

Julia Roberts también fue una primera opción para ese mismo papel en Mirror Mirror (2012), aunque en esa ocasión fue la actriz la que no lo tenía tan claro. Llegó a pensar que su participación en el proyecto era una idea terrible. Sólo cuando se reunió con el director Tarsem Singh, su opinión cambió por completo. «Soy una gran fan de Tarsem y caí rendida a sus pies». El único problema que tuvo la actriz fue en una escena con el príncipe sin camisa (Armie Hammer) en la que la reina comenta lo suave que es su pecho. Esta línea tuvo que modificarse cuando Hammer se negó a depilarse el vello.

Charlize Theron, en cambio, no fue la primera opción para la reina malvada de Blancanieves y la leyenda del cazador (Snow White and the Huntsman) (2012). Antes que en ella, los productores pensaron en Angelina Jolie o Winona Ryder. Charlize tuvo que elegir entre estar en J. Edgar (2011) o en esta película.

Clint el único

Al final Clint Eastwood se quedó sin su actriz y recurrió a Naomi Watts para sustituirla. Unos se van y otros quieren estar. Bradley Cooper ha contado que, antes de hacerlo por fin en la extraordinaria American Sniper (El francotirador) (2014) siempre había querido trabajar con Eastwood. “Le mandé tantas grabaciones con pruebas mías que tenía la sensación de que ya habíamos trabajado juntos. Le mandé una por Banderas de nuestros padres (2006), otra para Gran Torino (2008), para hacer de cura o de policía. En J. Edgar (2011), para ser el amante de Leonardo DiCaprio. Y es que Clint Eastwood no hace audiciones, pide que se las mandes”.

Un genio, un clásico

Se entiende la obsesión de Cooper por trabajar con el veterano cineasta. Ahora mismo no hay nadie como él en Hollywood. Es un genio y un clásico del cine. El mismo que nunca se ha mordido la lengua. Nadie le tose, ni siquiera para el dichoso asunto de eso tan sagrado en Hollywood como son las proyecciones de prueba entre público seleccionado antes del estreno de la película. “Si tanto les interesa la opinión de un empleado de supermercado (en los tests de prueba), que lo contraten a él para hacer la película”. El legendario ejecutivo de, entre otras, United Artists, Paramount y Columbia Pictures, David Picker fue uno de los que mejor conoció a Eastwood. “Le hubiese ido igual de bien (a Clint Eastwood) si en lugar de seguir los dictados de las investigaciones de mercado, hubiese colgado los títulos de los proyectos potenciales en la pared de su oficina y les hubiese lanzado dardos para elegir los que iba a producir”.

A vueltas con los enanitos

Volviendo al universo Blancanieves, de las dos que se estrenaron en 2012, la que tuvo un rodaje más movido fue Blancanieves y la leyenda del cazador. No sólo que Kristen Stewart golpeara accidentalmente en la cara a su coprotagonista Chris Hemsworth, dejándole un ojo morado (momento que se quedó en la película). Si Blancanieves (2025) provocó polémica porque se iban a contratar a actores enanos de verdad y por eso se vieron obligados a crear los personajes por ordenador, Blancanieves y la leyenda del cazador fue atacada por todo lo contrario. En esa película los enanitos no son interpretados por enanos reales, sino que se utilizan trucos para que los actores parezcan más pequeños. Esto provocó fuertes críticas de gente como el actor Warwick Davis.

Es igual lo que hagas, hay que criticar

Es igual lo que hagas, te van a criticar de todas formas. También le salió caro su comportamiento a Kristen Stewart. La actriz tuvo un romance con el director Rupert Sanders durante el rodaje. Cuando estalló el escándalo, el novio de Stewart, Robert Pattinson, se marchó de la casa que compartía con ella, mientras que la esposa de Sanders, Liberty Ross, que en la película interpreta a la madre de Blancanieves, inició los trámites de divorcio. La cosa fue más lejos cuando Universal Pictures decidió excluir a Kristen Stewart de la secuela a modo de castigo por todo el lío que se había montado. Se tituló Las crónicas de Blancanieves: El cazador y la reina del hielo (The Huntsman: Winter’s War) (2016) y a falta de una estrella, los productores ficharon a dos, Jessica Chastain y Emily Blunt, para acompañar a Charlize Theron y Chris Hemsworth.

Blancanieves ha muerto

Raymond Chandler escribía en su novela The Little Sister (La hermana pequeña) que “el cine es el único negocio del mundo en el que se pueden cometer todos los errores posibles y aun así ganar dinero”.

No es el caso de Blancanieves, que ha muerto para el cine, por lo menos durante un tiempo. El fracaso de la última versión de Disney ha dejado fuera de juego al mítico personaje creado por los hermanos Grimm. Es una pena, pero Gal Gadot tendrá que esperar la llegada de ese papel para el que ha nacido; ¿será la biografía de Cleopatra o la de Hedy Lamarr, dos de sus proyectos soñados?

La película costó 250 millones de dólares y ha recaudado en el mundo 205. Las cuentas no salen. Menos mal que en Disney la mayoría de las veces las cifras sí cuadran. Contra todo pronóstico, Lilo & Stitch se va a convertir en una de las películas más taquilleras de 2025. En ese caso el negocio ha salido redondo. Con un presupuesto de 100 millones, lleva recaudados 858. A medias se va a quedar la última entrega de Misión Imposible. Ha superado lo que ha costado (400 millones) recaudando poco más de 500.

Gal Gadot, el productor Marc E. Platt y Rachel Zegler en la premiere mundial de Blancanieves celebrada en El Capitan Theatre de Hollywood, California, en marzo de 2025

Malos rollos en el reino de Blancanieves

Si Kristen Stewart y Rupert Sanders la liaron y se liaron durante el rodaje de Blancanieves y la leyenda del cazador, Gal Gadot y Rachel Zegler trasladaron a la realidad el mal rollo que tienen sus personajes, la malvada reina y Blancanieves. Zegler va a ser ahora Evita en el musical de Andrew Lloyd Webber y Tim Rice. En el West End entre el 1 de julio y el 6 de septiembre. Todo el que quiera aplaudirla ya sabe lo que tiene que hacer. Quien no estará seguro en el patio de butacas es Gal Gadot. Es lo que pasa cuando tú eres judía nacida en Israel y tu compañera de reparto se declara en plena promoción propalestina.

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