En la película interpretan a los padres de Nico (Diego Montejo), un chaval de quince años inteligente e introvertido que sufre acoso escolar. Ellos son los propietarios de la única funeraria del pueblo y eso marca. Víctor Clavijo y Alexandra Jiménez estrenan la comedia de misterio Los Muértimer
Dirigida por Álvaro Fernández Armero, Los Muértimer tiene mucho de comedia de aventuras, humor negro y algo de terror. Víctor Clavijo y Alexandra Jiménez son los propietarios de la funeraria del pueblo y la trama se centra en un grupo de chavales que investigan una de las muchas historias misteriosas que oculta el cementerio. El hallazgo de un cadáver y unas joyas robadas va más allá de lo que esperaban.
Víctor Clavijo cambia de registro con esta película. En sus últimos trabajos sus personajes estaban al borde del colapso (La infiltrada, La espera, la miniserie Los Galindos. Toda la verdad).
Alexandra Jiménez no para y estos últimos meses ha encadenado un estreno tras otro: Buscando a Coque, Menudas piezas, Sin cobertura, Tras el verano. Víctor Clavijo y Alexandra Jiménez estrenan la comedia de misterio Los Muértimer
Por qué hay que verla
Con guion de Jelen Morales, la película está basada en la exitosa trilogía de cómics Los Muértimer de la joven ilustradora francesa Léa Mazé, -nominada a los prestigiosos Premios de la Industria del Cómic Will Eisner de Estados Unidos y presente en la selección del Festival Internacional de Cómic de Angoulême- y narra la historia de cinco amigos que descubren una trama de robos de joyas en un cementerio.
Gabi (Iratxe Emparan) llega desde Francia como estudiante de intercambio a un pequeño pueblo en el imaginario Valle de Murrieta, en el norte de España. Se aloja en casa de Nico Mortimer (Diego Montejo) y de los padres de este, Marisa (Alexandra Jiménez) y Sebastián Mortimer (Víctor Clavijo), que están al frente de la funeraria de la localidad, situada junto al cementerio municipal. Los dos chicos sufren bullying en la escuela debido al peculiar oficio de la familia Mortimer, más conocidos por los lugareños como “Los Muértimer”. Por esta razón, casi siempre se refugian en el cementerio, el único lugar donde nadie se mete con ellos.
