Seguro que si a Úrsula Corberó alguien le pregunta por qué aceptó intervenir en Lift, la actriz contestaría que porque fue una película divertida de hacer y es una película divertida de ver. Una de robos espectaculares que empieza en Venecia y termina en la Toscana. ¿Alguien se puede resistir a esta aventura de acción con semejantes escenarios, a los que hay que sumar además Londres, Bruselas y Cortina?
La actriz española interpreta a Camila, La Piloto del equipo de ladrones de élite. En su presentación al principio de la película, la vemos en una potente lancha en los canales de Venecia. “El champagne está en el hielo, así que vamos a darnos prisa”. Esa es su primera frase. Una mujer con carácter esta Camila, que más adelante le dice en castellano a su compañero Magnus (Billy Magnussen): “¿quieres que te meta una buena hostia?”.
Lift nos cuenta la historia de una banda internacional que se pone en manos del lado de la ley, la Interpol, para robar 500 millones de dólares en lingotes de oro que van a bordo de un avión A380 de pasajeros. El grupo tiene que secuestrar el aparato y llevarse el oro, cuyo propietario es un tipo muy peligroso que está dispuesto a sembrar el terror en el planeta (y como advertencia empieza inundando Madrid). Se llama Jorgensen y lo interpreta el francés Jean Reno como si estuviera en una película de James Bond. Su modelo bien puede ser el célebre Hugo Drax, que encarnó otro francés, Michael Lonsdale, en Moonraker (1979). Como este, Jorgensen también tiene una espectacular villa y un perro al que es mejor no acercarse demasiado.
Cuando se entera del loco plan, Camila exclama incrédula: “no vamos a secuestrar un avión, no estamos en 1970”. Y tiene razón. Con la saga Aeropuerto en mente (que tuvo películas en 1970, 1975, 1977 y 1979), Lift es tan entretenida como divertida, como leer un cómic o como pasar de la mejor manera posible una tarde de domingo lluviosa.
Por algo su director es el “marchoso” F. Gary Gray, que ya nos ofreció una película del estilo de esta, The Italian Job (2003), que también comienza en Venecia con una persecución y el atraco principal es el robo de lingotes de oro, estuvo al mando de la octava entrega de Fast & Furious (2017) y firmó Negociador (1998) con Samuel L. Jackson y Kevin Spacey, y Un ciudadano ejemplar (Law Abiding Citizen) (2009), con Gerard Butler y Jamie Foxx, que estaban muy bien.
El jefe de la banda de ladrones es Cyrus, interpretado por Kevin Hart, comediante formado en el Stand up. Frente a él, y luego de su lado, tenemos a una estricta y muy seria agente de la Interpol que encarna la inglesa Gugu Mbatha-Raw.
Camila se encarga dentro del equipo de pilotar todo tipo de aparatos. Denton (Vincent D’Onofrio) es un maestro del disfraz, Mi-Sun (Kim Yun Ji) de la informática, Magnus es la parte que ejecuta los robos y Luke (el británico de ascendencia india Viveik Kalra) tendrá un importante y decisivo papel en el robo de los lingotes. Y luego está Huxley, el jefe de la Interpol, interpretado por Sam Worthington en uno de los descansos de la saga Avatar.
Lift: Un robo de primera clase (2023) se puede ver en Netflix
