Tim Burton nació para el cine bajo el manto de Disney, primero como animador y luego como director de cortos. La relación entre cineasta y empresa ha pasado por todo tipo de momentos, unos buenos y otros no tanto, pero ahí están las películas que han salido de esa colaboración: como productor de Pesadilla antes de Navidad (1993) y como director de las dos películas basadas en Alicia en el país de las maravillas (2010 y 2016) y Dumbo (2019). Precisamente, esta última fue la que puso punto final a la intermitente relación entre cineasta y estudio y parece ser que de forma definitiva. A pesar de recaudar más de 350 millones de dólares en la taquilla mundial, la película perdió dinero debido a su enorme presupuesto de marketing.
Fue entonces cuando Tim Burton declaró que tras su experiencia en esta película no iba a volver a colaborar con Disney. «Se ha vuelto muy homogeneizado, muy consolidado… Mi historia con Disney es especial porque comencé allí. Luego me contrataron y despidieron varias veces”.
El rodaje de Dumbo, una película que por alguna extraña razón no funciona como debiera, es la razón por la que, en palabras de Burton, “mis días con Disney han terminado. Me di cuenta de que yo era Dumbo, que estaba trabajando en este gran circo horrible y que necesitaba escapar. En ese sentido, la película es bastante autobiográfica».
Dumbo se estrenó justo cuando Disney compró 20th Century Fox, una operación que cambió el negocio del cine. Ahora, el director estrena la secuela de Bitelchús (6 de septiembre) bajo el manto de Warner.