Es una de las mejores películas de Woody Allen, por lo menos de las más redondas de su última etapa. Hablamos de Match Point (2005) y es mucho más: una de las películas favoritas del director junto con La rosa púrpura de El Cairo (1985), Recuerdos (1980), Broadway Danny Rose (1984) y Misterioso asesinato en Manhattan (1993); la más larga de toda su filmografía (dura dos horas y cuatro minutos); la primera desde Hannah y sus hermanas (1986) en obtener beneficios en Estados Unidos (costó 15 millones de dólares y recaudó 23, y en todo el mundo 85); y la primera de su carrera rodada íntegramente en Inglaterra.
Pero esta intriga de cine negro, -inspirada en la novela de Theodore Dreiser Una tragedia americana (1925), adaptada al cine en Un lugar en el sol (1951), con Montgomery Clift, Shelley Winters y Elizabeth Taylor-, pudo haber sido muy distinta porque parte de su éxito se debió a la presencia de Scarlett Johansson en el papel de la seductora y fascinante Nola Rice. Y resulta que la norteamericana no fue la primera opción para el personaje.
Como la película se iba a rodar en Gran Bretaña, Allen debía contar con equipo británico. La elegida para interpretar a Nola fue Kate Winslet y así fue anunciado. «Faltaban pocos días para empezar a rodar y Kate me comunicó que dejaba la película porque quería pasar más tiempo con sus hijos, cosa que entendí», ha contado Woody Allen.
Match Point se rodó entre junio y agosto de 2004 y el hijo que tiene la actriz con Sam Mendes, Joe Anders, no tenía ni un año.
Este cambio de estrella marcó el inicio de la colaboración entre Scarlett y Woody, que continuó con Scoop (2006) y Vicky Cristina Barcelona (2008).