El final de Mindhunter es una de las noticias más tristes de la historia de la televisión y de la vida de Netflix. David Fincher cerró esta obra maestra después de la segunda temporada y con una trama abierta (la del asesino en serie conocido como BTK).

En compañía de los agentes Ford y Tench
Los agentes del FBI Holden Ford (Jonathan Groff) y Bill Tench (Holt McCallany) nos decían adiós tras una compleja investigación en Atlanta que acababa con la detención de Wayne Williams, el asesino en serie que acabó con la vida de más de 20 niños entre 1979 y 1981.
Durante dos temporadas, estrenadas en 2017 y 2019, 19 episodios en total, acompañamos a Ford y Tench en su periplo por diferentes prisiones del país para estudiar el comportamiento de los asesinos en serie más famosos encarcelados. “El crimen ha cambiado, el mundo no tiene sentido” y por eso es necesario las entrevistas con los asesinos. A lo mejor ellos tienen la clave de ese nuevo fenómeno que está por todo Estados Unidos: el criminal que mata sin motivo y en serie a personas con las que no tiene ninguna relación. La serie comienza en 1977, cuando la situación está descontrolada (se calcula que durante finales de los 70 y principios de los 80 operaron unos 200 asesinos en serie sólo en Estados Unidos).

Entrevista con lo peor de lo peor
Edmund Kemper (terrorífico Cameron Britton), Monte Rissell (Sam Strike), Charles Mason (Damon Herriman), Richard Speck (Jack Erdie), Jerome Brudos (Happy Anderson) y muchos más pasan por los 19 capítulos. Mientras se van resolviendo las entrevistas y el estudio psíquico de estos monstruos se va completando, hay una subtrama que serpentea por toda la serie. Es la de Dennis Rader, más conocido como BTK (las iniciales de Bind, Torture and Kill, es decir, Atar, Torturar y Matar). Con él arranca cada capítulo y con él termina la segunda temporada. BTK se pone una siniestra careta (como de la película Los Extraños) rodeado de fotos de sus víctimas. Rader fue arrestado en 2005, pero en la época en que transcurre Mindhunter todavía quedaba mucho para que lo atraparan. Su caso casi fue tan enigmático como el de Zodiac y Thomas Harris se inspiró en él para construir a Francis Dolarhyde, el asesino en serie que entra en casas y mata familias de El Dragón Rojo.

Se merece una tercera temporada
Por todo esto, Mindhunter se merecía por los menos una tercera temporada. Pero David Fincher, productor de toda la serie y director de siete episodios, lo tenía muy claro: «Es una serie muy cara y, a los ojos de Netflix, sin la audiencia suficiente para justificar la inversión”. No le dieron el dinero que pedía y el programa se canceló.
Fincher es mucho Fincher y no estaba dispuesto a responsabilizarse de una nueva entrega de Mindhunter sin las garantías de calidad garantizadas.
Pero ahora, cuando todo parecía más que zanjado, Holt McCallany aparece para declarar en la página web CBR (Comic Book Resources) que existe una pequeña esperanza, “una posibilidad de renacimiento” que, incluso, ya está hablada con Fincher.
Según el actor, es posible que la serie regrese, pero dividida en tres películas.
Según cuenta el propio Holt McCallany, se reunió con Fincher, al que considera el mejor director de Hollywood, hace unos meses en su oficina y el director le dijo que había una posibilidad de hacer tres películas de dos horas basadas en el universo Mindhunter. Incluso hay guionistas trabajando ya en las historias, “pero ya sabes, David tiene que aprobar los guiones».