Bailarina de niña, Miss Israel sin proponérselo, modelo internacional por las pasarelas de París y Milán y casi chica Bond en Quantum of Solance (2008). Ese “no” que recibió para ser la mujer en busca de venganza Camille, personaje que terminó en manos de Olga Kurylenko, fue paradójicamente el detonante para comenzar una carrera de actriz, profesión que ni se había planteado si no fuera porque una agente de casting inglesa fue a Israel buscando a la compañera de 007. Gal Gadot se presentó en la prueba “solo para que mi agente dejara de darme la lata y se callara de una vez”.
Al final, debutó en el cine con Fast & Furious: Aún más rápido (2009) y unos años después se convirtió en una estrella gracias a Wonder Woman.
Ahora, con el poder que le da haber estado en varios éxitos de taquilla, Gal Gadot lucha para sacar adelante dos proyectos soñados: una biografía de Cleopatra y otra de Hedy Lamarr, la que fue considerada la actriz más bella de Hollywood.
En marzo de 2025 veremos a Gal Gadot interpretando a la madrastra de Blancanieves en una adaptación en imagen real del cuento, un poco siguiendo los pasos que antes dieron, curiosamente todas en películas estrenadas en 2012, Charlize Theron (Blancanieves y la leyenda del cazador), Maribel Verdú (Blancanieves) y Julia Roberts (Blancanieves. Mirror, Mirror).