La protagonista de Argylle, Elly Conway, es como François Merlin, el autor de la serie de novelas protagonizadas por el ficticio espía Bob Saint-Clair que interpreta Jean-Paul Belmondo en Cómo destruir al más famoso agente secreto del mundo (Le Magnifique) (1973). También es como Stanley Ford, el dibujante de tiras cómicas protagonizadas por el agente secreto Bash Brannigan, al que da vida Jack Lemmon en la divertida comedia de Richard Quine Cómo matar a la propia esposa (How to Murder Your Wife) (1965). Y ya puestos, puede tener algo de Joan Wilder, la famosa escritora interpretada por Kathleen Turner en Tras el corazón verde (Romancing the Stone) (1984), y de Loretta Sage, la creadora del héroe de aventuras Dash en una serie de novelas de éxito que encarna Sandra Bullock en La ciudad perdida (The Lost City) (2022). Todos ellos creadores y artistas de fama mundial que contemplan atónitos cómo las hazañas y misterios que han imaginado en sus novelas se hacen realidad en sus muy cotidianas y aburridas vidas.
ELLY CONWAY (Bryce Dallas Howard)
Escritora de día, madre de un gato de noche, Elly Conway lleva una vida muy tranquila y hace gala de una obsesión nada sana por los personajes de sus novelas. Interpretada por Bryce Dallas Howard, Elly es una mujer solitaria que vive en un mundo imaginario hasta que un agente secreto llamado Aidan (Sam Rockwell) se le acerca en un tren y le informa de que ella es el objetivo de una malvada organización secreta conocida como la División. De golpe, Elly se ve inmersa en una peligrosa y glamurosa carrera a contrarreloj alrededor del mundo intentando desvelar un misterio metido en su cabeza y salvar su vida.
La actriz dice que el guion le gustó de inmediato: “Es un thriller de espías totalmente diferente a lo que se ha visto hasta ahora; no podía creerlo mientras leía el guion. Primero pensé que me metería en la piel del personaje, y acto seguido me dije: ‘No, yo soy este personaje’. Que me ofrezcan un papel así a los 40 años no ocurre cada día. Me pareció un pequeño milagro empoderante y divertido que me llenó de satisfacción. Es el mejor guion que he leído nunca y el mejor papel que he tenido ocasión de interpretar”.
AIDAN (Sam Rockwell)
La elegancia y seguridad de Argylle, el espía imaginario creado por Elly Conway, no se ve reflejada del todo en el auténtico agente secreto Aidan, que demuestra no ser un hombre muy pulido. Aidan da la impresión de no haberse cambiado de ropa o de no mirarse al espejo en mucho tiempo. Pero Elly, a pesar de todo, accede unirse a una persona a la que normalmente no acompañaría.
“Me entusiasmé cuando leí el guion por primera vez. Añadimos un toque de humor al estilo Han Solo al personaje de Aidan. Es una amalgama de antihéroes a los que llevo siguiendo desde hace años, como Bill Murray, Jack Nicholson, Richard Pryor e incluso Mercucio. Finge tener una vertiente canallesca, pero solo es una pose, no tiene nada de Mercucio, por dentro es Romeo de principio a fin. Conecté con Matthew como dos cerebritos cinéfilos, intercambiando referencias. En el plató, me decía: ‘Más Bill Murray’ o ‘Más Jack Nicholson’ porque sabía que le entendería por la películas de las que habíamos hablado.
Las secuencias de acción a la décima potencia no dejaron físicamente intacto al actor y sirvieron para incrementar aún más su admiración por los especialistas. “Esas mujeres, esos hombres son increíbles”, reconoce. “Me golpeé la pierna en una escena, no era nada, pero me dolió durante varios días y se lo comenté a uno de los especialistas. Me dijo: ‘Sí, me ahogué rodando Juego de tronos. Tardó tres minutos en recobrar el conocimiento. A partir de entonces dejé de quejarme”.
RITTER (Bryan Cranston)
El papel de Ritter, el líder de la siniestra organización secreta conocida como la División, fue para Bryan Cranston. El actor no duda en reconocer que trabajar con Matthew Vaughn fue una maravilla. “Cuando se empieza como actor, se dice que sí a todo porque hace falta trabajar. Si se tiene suerte, llega el momento en que se puede escoger. Cuando eso ocurre, se buscan proyectos dirigidos por personas con mucha visión. Matthew es de esas personas. Uno se siente muy cómodo trabajando con un cineasta con la seguridad que Matthew demuestra tener.
RUTH (Catherine O’Hara)
Ruth es la sufrida madre de Elly Conway y su editora, una mujer controladora que quiere dirigir la vida de su hija, animándola a quedarse en casa y seguir escribiendo novelas de espías. Catherine O’Hara es un auténtico icono de la comedia y quedó cautivada por el tono del guion y, sobre todo, por los cambios y la evolución de los personajes en la historia: “Cada veinte páginas más o menos caía otra pedrada, era genial, no podía dejar de leer”.
ARGYLLE (Henry Cavill)
Apuesto, encantador, con un corte de pelo impecable, Argylle, tal como le imagina Elly Conway en sus novelas, es un espía de calibre mundial que no se detendrá ante nada con tal de hacer justicia a los buenos. Es el paradigma del perfecto espía.
Matthew Vaughn convenció al actor de que aceptara el corte de pelo incluso antes de que leyera el guion. “Matthew me dijo: ‘Mira, llevarás el pelo corto y de punta. Ya sé que puede parecer una locura, pero te prometo que va a funcionar. Bueno, puede que no. Pero lo pasarás bien, confía en mí’. Matthew es maravilloso contando historias. Sabe lo que quiere y cuida mucho los detalles. Nos entendemos a la perfección, nos conocemos desde hace mucho y siempre me he divertido trabajando con él. Es un buen comunicador, directo, y como actor es justo lo que necesito. Al fin y al cabo, se trata de confiar en el director, en el jefe, y se puede confiar en Matthew”.
LAGRANGE (Dua Lipa)
Lagrange, una mujer elegante, seductora, letal y eterna némesis de Argylle, a la que encarna Dua Lipa, es una terrorista internacional que trabaja para quien pague más. Dua Lipa debutó en el cine oficialmente con el estreno de Barbie en verano de 2023, pero rodó Argylle antes. “Se había corrido la voz que, en algún momento, me gustaría hacer una película, y Matthew me llamó. La idea me entusiasmó, pero me puse nerviosa porque nunca había hecho nada parecido”.
WYATT (John Cena)
El ‘forzudo’ Wyatt – tal como lo describe el propio John Cena – es el mejor amigo y cómplice más cercano del agente Argylle. “Si Matthew solo me hubiera querido para hacer bulto, le habría dicho que sí. Tiene un don para crear un universo nuevo desde cero y es capaz de sacar una obra maestra de la nada”.
ALFRED SOLOMON (Samuel L. Jackson)
Samuel L. Jackson interpreta un papel clave, el de Alfred Solomon, antiguo subdirector de la CIA, que vive en el exilio, menospreciado por el mundo del espionaje.
“Matthew confía en mí y me permite que le proponga ideas para el personaje, qué aspecto debería tener, cómo viste, cómo habla. Se fía de mí para que construya un personaje que funcione dentro de la historia que él cuenta. Trabajar en esta película se asemeja a preparar una obra de teatro porque ensayo mucho antes de llegar al plató. Pero siempre hablo con Matthew para que sepa exactamente lo que voy a hacer. Es un hombre tremendamente meticuloso y un genio de la técnica, pero una de sus mayores fuerzas es la fe que tiene en los actores”.
KEIRA (Ariana DeBose)
Ariana DeBose da vida a Keira en el mundo imaginario de las novelas Argylle, una técnica que a menudo se une a Argylle y a Wyatt en sus misiones, en general para sacarles de algún lío.
Ariana DeBose estaba encantada de tener la oportunidad de trabajar en una película de Matthew Vaughn. “Con él, siempre pienso en la elegancia. Lo mismo que cuando se ve una película de Bob Fosse, es elegante. Con Matthew pasa lo mismo, sabes que es una película suya. Me siento honrada de ser una pequeña parte de este universo”.
ALFIE (Chip)
En un momento dado de la escritura del guion, el director decidió que el gato de la protagonista tenía que tener más protagonismo.
“El primer día de rodaje, el gato profesional que habíamos contratado a un precio muy elevado se negó a cooperar. Me fui a casa, recogí a Chip (el gato de su mujer) y anuncié que estaría conmigo durante los tres próximos meses de rodaje. Conducir cada día al plató con Chip fue toda una experiencia, y se acomodó en mi tráiler durante el rodaje. No tardó en conquistarme y su trabajo en la película es excelente. Se convirtió en la perfecta fuente de discusión entre los dos personajes principales, y se comportó como un gato encantador, gracioso y dispuesto a hacerse con todas las escenas”.
Chip, como buen hijo de celebridades, no despertó el cariño de todos sus compañeros de rodaje. “El maldito gato ha sido una auténtica pesadilla”, dice, riendo, Sam Rockwell. “Siempre se metía entre la cámara y yo, se paraba en medio de una escena reclamando un premio, se encerraba en el tráiler… Si llega a rodarse una secuela, pienso exigir en el contrato que Chip no se atreva a mirarme a los ojos”.