En la 96 edición de los premios Oscar triunfó Christopher Nolan y su película Oppenheimer al lograr siete estatuillas, todas en grandes categorías: Mejor Película, Mejor director, mejor guion adaptado, mejor edición, mejor actor para Cillian Murphy, mejor compositor, y mejor actor de reparto para Robert Downey Jr.
Los dos directores españoles nominados se fueron de vacío. J.A. Bayona en la categoría a mejor película internacional perdió frente a La Zona de Interés y en la categoría de maquillaje se rindió ante Pobres criaturas. Por su parte, Pablo Berger, nominado con Robot Dreams a mejor filme de animación, se vio superado por la cinta de Miyazaki El niño y la garza.
La otra gran película triunfadora de la noche fue Pobres criaturas, la cinta de Yorgo Lanthimos consiguió cinco galardones, liderados por el de mejor actriz que fue a parar a Emma Stone. El teatro Dolby enmudeció al escuchar el nombre de Stone, porque se esperaba que ganara Lily Gladstone, protagonista por Los asesinos de la luna. Siete años después de ganar por La La Land, Stone recogió su segundo Oscar. La actriz agradeció a Lanthimos, con quien acaba de hacer otra película, Kinds of Kindness, al tiempo que reflexionó sobre el carácter colaborativo del cine. “La mejor parte de hacer películas es que todos estemos juntos”, dijo. “Me siento profundamente honrada de compartir este premio con cada miembro del elenco, con cada miembro del equipo, con cada persona que puso su amor, su cuidado y su brillantez en la realización de esta película”.
En el apartado a mejor actriz de reparto ganó Da’Vine Joy Randolph por Los que se quedan y lo celebró pidiendo no caer en el olvido, “espero que la industria no me olvide despues del Oscar”, algo que ojalá no suceda con Lily Gladstone. Su pérdida ante Stone engrandece la deuda de Hollywood a la hora de premiar a los actores nativos de Estados Unidos. Le costó al público recuperarse del golpe bajo dejado por el oscar a Stone, incluso hubo quien pensó, al anunciar Al Pacino de forma poco protocolaria el ganador a mejor película, que Pobres criaturas podría superar a Oppenheimer, pero era la noche de Chris Nolan y no había drama griego cociéndose entre los sobres de los Oscars del 2024.
Para Nolan, los honores llegaron después de una historia complicada con los Oscar: nominado en siete ocasiones gnorado por su brillante versión de Batman el cineasta terminó vengándose con siete Oscars. Gran caballero, Nolan dio la gracias a la Academia denominándose un apasionado defensor de la experiencia de la pantalla grande. “Las películas tienen poco más de 100 años y no sabemos hacia dónde se dirige este increíble universo, pero saber que ustedes piensan que soy una parte significativa de él significa mucho para mí”.
Oppenheimer adquiere resonancia adicional en un momento de conflicto internacional, como dijo Cillian Murphy al recibir su estatuilla a mejor actor en su discurso de aceptación. “Hicimos una película sobre el hombre que creó la bomba atómica y, para bien o para mal, todos vivimos en el mundo de Oppenheimer”. Y hubo recordatorios tangibles de ese legado a pocas calles de la alfombra roja de los Oscar donde cientos de manifestantes pro palestina retrasaron el comienzo de la Ceremonia. Otros protagonistas de la noche utilizaron sus discursos para denunciar la crisis humanitaria en esa región así como la invasión rusa de Ucrania.
Robert Downey Jr. el Ave Fénix del milenio
Tras Nolan y Stone, la otra gran estrella de la noche fue Robert Downey Jr. Un hombre que se recicla tras su tumultuoso pasado hasta conseguir el mayor galardón de la industria. Downey Jr. es un cachorro de Hollywood, un hombre que creció entre Santa Mónica y Malibú, que recibió una educación privilegiada dentro del mundo del cine gracias a su padre, el director Robert Downey. Su primera nominación al Oscar fue por su papel de Charlie Chaplin en la década de los noventa, luego llegó una como secundario por Tropic Thunder en 2009, pero tras aquel amago de grandeza llegaron la soledad de las adicciones y la cárcel. No en vano el actor tuvo palabras para su abogado por ayudarle a mantenerse en pie tras las caídas.
La estrella superó a Ryan Gosling, Mark Ruffalo, Robert De Niro y Sterling K. Brown. Subiendo al escenario del Dolby Theatre de Hollywood, el actor de Iron Man, que iba vestido como una estrella de Rock, no se contuvo mientras se burlaba de su turbulento pasado. “Me gustaría agradecer mi terrible infancia y a la Academia, en ese orden”, señaló, antes de referirse a sí mismo como una “mascota gruñona” rescatada por su esposa. En ese momento agradeció a su mujer, Susan Downey, por amarle tanto que le devolvió la vida “por eso estoy aquí”. A sus 58 años, el actor recordó también al elenco y equipo de Oppenheimer, incluidos Cillian Murphy, Emily Blunt, Matt Damon y el director Christopher Nolan. “Os digo mi pequeño secreto: necesitaba este trabajo más que él a mí”, añadió Downey Jr. “Y estoy aquí ante ustedes siendo un mejor hombre gracias a eso. Lo que hacemos es significativo y lo que decidimos hacer es importante”. Esta victoria culmina una gran temporada de premios para Downey Jr., quien también recibió un Globo de Oro y un Premio SAG a principios de este año por su interpretación del ex presidente de la Comisión de Energía Atómica de los Estados Unidos, Lewis Strauss.
Los Angeles, María Estevez
