Grandes directores se unen para salvar un histórico cine de Los Ángeles 

Siguiendo la estela de Quentin Tarantino, que compró en el 2007 el emblemático New Beverly Cinema en Los Ángeles, un grupo de directores se ha unido para comprar el histórico Village Theater de Westwood y el grupo incluye algunos de los más grandes realizadores de Hollywood.

Una coalición de directores encabezada por Jason Reitman anunció que habían cerrado un acuerdo para hacerse cargo de este palacio del cine de 93 años de antigüedad que ha sido el favorito de Hollywood desde su inauguración en 1931. Este edificio, con una torre central estilo Art Déco, ha servido durante mucho tiempo como faro para los amantes del cine en busca del glamour de la vieja escuela. El Village es la gran casa para muchos estrenos de películas desde hace más de seis décadas. 

Originalmente, fue parte de la cadena Fox Theatres, pero el Village, que fue designado monumento histórico-cultural en 1988, ha sido propiedad y ha estado operado por el grupo Regency Theatres desde 2010. Cuando el teatro, que aparece en la película de Quentin Tarantino Érase una vez… en Hollywood (2019), salió a la venta el año pasado, Reitman se apresuró a reunir a otros cineastas para comprarlo. Originario de Los Ángeles e hijo del fallecido director de comedia Ivan Reitman (1946-2022), el director, cuyas películas incluyen Up in the Air (2009) y Ghostbusters: Afterlife (2021), ha crecido viendo películas en el Village. De hecho, el cineasta celebró el estreno de su gran éxito de 2007, Juno, en ese teatro.

Su esfuerzo por salvar el Village Theatre se produce en un momento en que las salas de cine de Los Ángeles y de todo el país se enfrentan a serias dificultades financieras frente a operadores inmobiliarios que están deseando comprar estas golosas ubicaciones urbanas. Contra la especulación, Reitman reunió a una diversa gama de cineastas ganadores de Oscar cuyo trabajo abarca una variedad de géneros. Entre los nuevos propietarios del teatro se encuentran directores como Christopher Nolan, J.J. Abrams, Guillermo del Toro, Christopher McQuarrie, Judd Apatow, Damien Chazelle, Steven Spielberg, Chris Columbus, Bradley Cooper, Alfonso Cuarón, Hannah Fidell, Alejandro González Iñárritu, James Gunn, Sian Heder, Rian Johnson, Gil Kenan, Karyn Kusama, Justin Lin, Phil Lord, David Lowery, Chris Miller, Todd Phillips, Gina Prince-Bythewood, Jay Roach, Seth Rogen, Emma Seligman, Emma Thomas, Denis Villeneuve, Lulu Wang y Chloé Zhao.

El teatro cuenta con un gran auditorio con capacidad para más de 1.300 personas, una pantalla con capacidad para cintas de 70 mm y un sistema de sonido de vanguardia. En el futuro exhibirá una combinación de películas de estreno y programación de repertorio seleccionada por los propietarios del teatro. Varios de los cineastas, incluidos Justin Lin, Prince-Bythewood, Jonathan Dayton, Valerie Faris, Brad Silberling y Alexander Payne, son ex alumnos de UCLA, que se encuentra a sólo una calle de distancia del teatro.

Dentro de la casa, los directores planean exhibir artefactos de sus colecciones personales, incluidos accesorios, artículos de vestuario y copias de películas. Con el tiempo, hay planes para agregar un restaurante, un bar y una galería, pero el teatro permanecerá abierto en todo momento.

Reitman habló sobre la inspiración detrás del acuerdo, el estado de la asistencia al cine y lo que depara el futuro para Village Westwood. “Recuerdo hacer cola en esa esquina mientras mi padre me llevaba al cine. Esa fue mi introducción a la experiencia de ir al cine: llegar temprano, hacer cola a la vuelta de la esquina y sentirme parte de una comunidad de personas que aman las películas, que no podían esperar a ver una película la noche del estreno y que sabían que la conversación, el antes y el después de la película era casi tan importante como ver la película en sí”. 

Muchos cineastas claramente tienen un lugar especial en su corazón para un cine con una trayectoria histórica dentro de la industria. “Lo que es increíble para mí es lo rápido que este grupo se unió. Escuché que el teatro estaba a la venta el verano pasado y recordé lo que pasó con el Teatro Nacional a pocas calles de distancia (cerró en 2007 y fue demolido). También escuché que una de las personas interesadas quería convertirlo en un lugar de teatro musical en vivo y otro en hacer un local comercial. Inmediatamente hice una oferta y comencé a contactar con directores que conocía. La respuesta fue rápida y positiva. Creo que los primeros directores con los que hablé fueron Rian Johnson y Guillermo del Toro, quienes inmediatamente dijeron que estaban dentro. Cuantos más preguntaba, más comentarios positivos recibía y más seguía escuchando que había que salvarlo. Todos teníamos una visión común de poseer colectivamente una sala de cine que pudiera servir como un centro comunitario para todos los que aman las películas, un lugar donde poder tomar un café o un bocado antes o una bebida después y amar las películas en todos los sentidos”, concluye Reitman.

Los cines, hoy por hoy, encuentran sus héroes en los directores.

Texto: María Estévez (Los Angeles)

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