Esa es la pregunta, ahora que el actor, guionista, productor y director estrena Vacaciones de verano, con Segura y Leo Harlem como dos amigos que pierden su trabajo y se ven obligados a aceptar un empleo temporal como animadores infantiles en un hotel de lujo.
Si esta comedia tan de verano vuelve a dominar la taquilla, como está previsto, sería el quinto año consecutivo que Santiago Segura llega a la cima.
En 2019, Padre no hay más que uno recaudó 14.2 millones de euros, fue la película española más taquillera del año y la novena a nivel general, todo un logro porque por delante de ella se colocaron auténticos bombazos como El Rey León, Joker, Vengadores: Endgame, Toy Story 4, Frozen 2, Star Wars: El ascenso de Skywalker y Dumbo. 2019 fue un año muy potente y Segura consiguió hacerse un hueco.
En 2020 llegó la pandemia y el cineasta subió la apuesta con Padre no hay más que uno 2, convirtiéndose en la película más taquillera del año en general, con 12.9 millones de euros.
Entramos en 2021 y se estrenó A todo tren Destino Asturias, 8.4 millones de euros, la película española más taquillera del año y la cuarta sumando todas las producciones que pasaron por los cines (sólo superada por Spider-Man. No Way Home, Fast and Furious 9 y Venom 2.
2022 fue el año de Padre no hay más que uno 3, que acumuló en taquilla 15.6 millones, primera española y cuarta en general tras Avatar: El sentido del agua, Minions. El origen de Gru y Jurassic World: Dominion.
Vacaciones de verano es la película de 2023 y, si se repite la proeza, alguien debería activar de una vez por todas el Protocolo Segura, es decir, reconocer de una vez por todas que Santiago Segura es para la industria del cine español mucho más que un simple amiguete.
